Las vistas de la noche. {Giselle.}

Estaba por romperla ya , suponia. Era muy duro todo lo que pasaba. Siempre me pasaba todo lo malo. Era como si dios me castigara. Cuando note sus manos en mi cara y deje la barrandilla para mirarla. La oi y su voz me tranquilizo. Era como una droga , mi droga. No dije nada solo suspire. Aunque no podia evitar que las lagrimas cayeran sobre mi cara. Me venia su rostro , tanto de antes cuando era pequeña y ahora. Cuando la hice reir para la foto y cuando se rio con lo de los hijos. Cuando nos hicimos esa promesa. ¿Me lo prometes? Te lo prometo. Su voz tranquilizadora. Sus ojos. Su risa. Ella , no se que me pasaba con ella. Bueno si el chico duro se había enamorado. Pero lo nuestro era imposible. Ella estaba casada. Y cuando me fuera no la volvería aver maldita sea. Mi vida siempre se había habido una ilusión. Y era ella. Volver a encontrarla y cumplir la promesa. Recordaba el momento que me lo dijo. Hace nada. No paraban de salirme lagrimas aunque intentaban que no salieran. Pensé en la vida sin ella sin amor. Mi madre siempre decía que sin el amor no vale la vida. ¿Para que continuar si falta corazón? me pregunte entonces. Maldito en momento en que la volví aver. Maldito el momento que hicimos esa estúpida promesa de niños. Malditas las ganas de volver a verla si ya la he perdido. Maldita suerte de quererla aunque se caiga el mundo , vivir para ella , morir cada segundo. Maldita la hora que hicimos esa promesa , maldita sea. Para mi el cielo se había desplomado. Aunque también tenia que entenderla. Son muchas las vueltas que da el camino. Yo estaba desesperado , por como me golpeaba la vida , inmenso vació. Mi sufrimiento podría hacer un rió de melancolía. Antes de verla no sabia que era tanto , que era todo , mi principio y mi final. Lo infinito para mi. Me estaba volviendo loco tanto pensar en ello. Pero es que es verdad , ¿que sera de mi si no la vuelvo a ver?. Maldita sea la hora que la conocí , si dice adiós y yo la amo todavía. Maldita la hora que quise alcanzar el cielo y el cielo se desplomo. Yo era ese la adoraba y la adora , tal vez no fue bastante , tal vez me equivoque. Lo que si sabia es que hoy el dolo estaba matándome.

No podía dejar de maldecir todo y no podía oír nada de tanto dolor. Cuando note como me abrazo y me lo dijo al oído. Entonces reaccione y la mire. Deje de llorar y con una mano me quite las lagrimas que tenia. Mi rostro se puso duro. Quería contárselo pero no me atrevía. Maldito miedo. Ya basta Albert. Me dije a mi mismo. Actúa como un hombre y deja de llorar ni miedos. Esta vez oí la voz de mi padre cosa que me puso furioso. Pero me controle por ella. Suspire otra vez y me decidí por contárselo.

-Tengo miedo de no volverte aver. Todo este tiempo he estado buscándote y ahora que te he encontrado , no quiero volver a perderte.

Dije aunque al terminar de decirlo me arrepentí y baje la cabeza. Empezaba a verlo todo triste. Para mi el cielo se había caído , se había partido. Solo era un infierno sostenido. Sostenido por ella. No podía contarle como me sentía. Los malos recuerdos que me seguían. Ese miedo , El odio. Tenia tanto miedo a perderle. Sabia que jamas la olvidaría , lo sabia. No se como , pero lo sabia. Instinto tal vez.

Vi cuando se separo y me mando a callar , supuse que no le había gustado que se lo contara. Es que me debí de haber callado. Si , debí de haberme callado. Cuando note su beso abrí los ojos como plato y cuando se separo yo también la mire. Mire a esos ojos que tenia. Esos ojos que me miraban. Tras pensarlo un poco supuse que lo había echo por lastima o tal vez pena. Pero no por que quisiera. ¿Quien querría a un asesino?. A alguien que ha matado a su padre y a saber si te mata a ti. Suspire el pensar así , yo mismo me hacia daño pensando así. Pero que podía hacer era así y así estaban las cosas , bueno estaban y eran. Volví a suspirar , pues era lo que me daba fuerza. Volví a ponerme duro la cárcel me había enseña. ¿Donde esta el Albert que salio de la cárcel? ¿El chico duro?. Ese Albert volvería a salir y vengaría la muerte de su tío y no se limitaría a pensar en nada mas.

El silencio se hacia eterno en esta conversión entre Albert y yo...

- Podrías decir algo...no se que decirte Albert, estoy casada eramos unos enanos, pensaba que lo decías de broma y no me esperarías hasta ahora...
No se que mas decirte, tampoco me gusta verte así y menos pro mi culpa.

Suspire varias veces, seguido de varios meneos de cabeza. Me sentía bastante mal en esta situación...Volví a dirigirme a aquel banco donde decidí sentarme.

Suspire al oírla. No podía hacer otra cosa. La mire fijamente. Me volví a poner las gafas. Y mire al mar.

-¿Que quieres que diga? Yo tampoco se que decir.

Oí lo otro que dijo y trague saliva. Es verdad , estaría casada y feliz. Estaba furioso y a la vez triste.

-No te preocupes , si no pasa nada.

Dije algo borde y falso. Puesto que estaba mintiendo. Si que pasaba. Y lo que pasaba era que me gustaba. Creía que me estaba pasando , así que baje la cabeza , no debí de hablarle así.

-Perdona por hablarte así , he pasado muchas cosas por mi vida y no tengo que pagarla con los demás..

Dije sinceramente es que por que diablos los pagaba con los demás , me volví hacia el mar y puse mis manos en la barandilla. Saque la pistola abrí eso de las balas, las saque y luego guarde la pistola. Coji las balas y las tire al mar.

-Se acabo..

Dije con voz dura y ronca para mi. No tenia fuerza lo sentía por mi tío. Tenia ganas de hacer eso que contaban la leyenda en esos momentos , mi madre estaba bien cuidada y pronto moriría. Mis amigos se las alegrarían y ella ni le importaría.

Cuando dije que no me preocupase pensé que como no me iba a preocupar. Suspire , ya no se por cuantas veces. Cuando vi que me quito la pistola lo peor ¡que pensaba tirarla! se la quite rápidamente.

-Si quieres pensar que esto loco piensa lo, esto se supone que es una pistola y la tengo por que es un regalo de mi difunto tío.

Al nombrarle mire al mar. Me guarde la pistola y volví a suspirar y luego mirar hacia el mar. Mire la hora de mi reloj y era muy tarde ya. Aunque no tenia nada de que preocuparme pues nadie me esperaba , ni se preocuparía si llego tarde o pronto. La mire sin saber bien que decir. Pues no sabia que decir. Volví a suspirar , otra vez. No se cuantas veces estuve suspirando , pues ya había perdido la cuenta , puesto que habían sido muchas , bueno , eso se quedaba corto , demasiadas diría yo.