Entre alturas y azucar [Naiala]

7.50

Había llegado diez minutos antes pues no quería hacerla esperar, llevaba como era ya usual de un tiempo a acá el cabello semilargo peinado hacia atrás, una tipo polo gris y unos pantalones de mezclilla sujetos por un cinturón de hebilla diminuta, no era de quienes usaban aquellos en que la hebilla era mas grande que el cinturón en si. Palpe mis bolsillos, llevaba la cartera y el celular, realmente lo único que necesitaba para hacer lo que quisiera.

Observe los puestos adentro del lugar y me apresure a la taquilla para comprar las entradas y de paso arreglar algunas cosas con los encargados del lugar, quería que nos dejaran subir a tantos juegos como quisiéramos, cual fuese cuando fuese, no planeaba no hacer fila solo que Naiala no tuviese que pagar nada, porque que poco cortes podría llegar a ser aquello, aunque sabia que podía llegar a molestarse prefería pagarlo yo. Le di una buena suma de dinero a la señorita y le sonreí secamente mientras escuchaba que le daba indicaciones por radio a quienes atendían los juegos –gracias- le dije sin mas guardando la cartera en el bolsillo trasero del pantalón y girándome en espera de su llegada, era de las pocas personas con quienes podía decir me llevaba bien.

Queria ver que tanto habia cambiado, por que un año era bastante tiempo, yo no suponia haber hecho un cambio demasiado sobresaliente, no usaba ya el cabello corto sino algo mas crecido, talvez habia desarrollado algo de musculatura, porque cierto era que dos o tres años atras era un palillo andante, pero fuera de eso no creia haber cambiado, ahora solo faltaba verla a ella.

(Eran las 7.55, siempre solia llegar puntual a las citas o justa, pero no le gustaba nada llegar tarde, odiaba la impuntualidad, le parecia una falta de respeto hacia la otra persona, ademas tenia muchisimas ganas de verlo, hacia un año que no le veia si no recordaba mal, pero aun asi parecia bastante mas tiempo, lo habia extrañado mucho y le agradaba la idea de que estuviera de nuevo en Maine, esperaba que fuera para quedarse, pero aun asi iba con el miedo de que aquella solo fuera una visita y se fuera de nuevo. Tambien estaba nerviosa por descubrir que habia pasado en ese año, que novedades le iba a contar, como le habia ido, como habia cambiado fisicamente, aunque eso no le importaba basicamente, siempre se habia sentido "atraida" por el, bueno atraida no era la palabra puesto que era algo mas fuerte, aunque nadie sabia de eso ya que ni ella misma lo reconocia.
Cuando estaba a escasos metros de llegar baja el ritmo del paso para buscarlo y verlo desde lejos, para coger aire y tranquilizarse un poco, lo ve alli, de pie parado, casi parecia que el tiempo no habia pasado por el, llevaba el pelo mas largo y tenia mas "cuerpo" suponia que habia estado haciendo ejercicio, la verdad es que estaba de muy buen ver, se acerca con paso clmado y firme hacie el, cuando estaba casi enfrente mueve levemente la mano en modo de saludo, se acer del todo) Hola Kyle es un placer verte de nuevo por aqui (le da dos besos suaves en la mejilla y un abrazo casi imperceptible, tenia ganas de ser mas efusiva, pues le alegraba muchisimo tenerlo ahi de nuevo pero no le salia serlo) ¿Como estas? ¿Que tal todo? (Hace esas dos preguntas y se calla, tenia muchisimas mas por hacer y le habria bombardeado con ellas, pero ahora era mas tranquila, mas calmada, ademas tendria tiempo de ir hablando de todo con calma, no era plan de agobiarle a los 5 minutos de estar con ella, le mria con curiosidad esperando su contestacion y observando aquellos ojos que tanto y nada decian a la vez, se fija en su ropa, iba muy guapo, se pone un poco sonrojada, pues ella se habia puesto unos vaqueros, una camiseta basica, unas deportivas y llevaba una chaquetita de punto para cuando empezase a refrescar, de haberlo sabido se habia "arreglado" un poco, no demasiado, pues ella solia vestir siempre por el mismo estilo, comoda e informal, llevaba el pelo recogido en una coleta alta algo despeinada aproposito)

Espero a lo mucho cinco minutos antes de que hiciera su triunfal aparición, al principio no le había visto sino hasta que agito los brazos mi mirada se poso sobre ella ¿Por qué tenia la sensación de que todo mundo había crecido y yo me quedaba estancado?, suspire ampliamente aunque de una manera imperceptible y le sonreí de medio lado sin asi dejar ver mi perlada dentadura.

Aquel rostro era de los pocos que no olvidaba por mucho tiempo que hubiese transcurrido desde la ultima vez que la había visto, lo cual había sido en vacaciones del año pasado, y esque sus facciones eran increíblemente parecidas a las de Crystal, no su cabello que si bien los de mi pequeña amiga eran tan negros como el carbón y los de Naiala rubio castaño, si en su rostro, eran bastante parecidas y posiblemente ese era el porque de que mi corazón se acelerara al tenerla cerca, era como única haber perdido a Crystal, era como pasar aun tiempo con ella, pero su carácter era muy poco diferente y talves eso también ayudara a hacerme sentir de aquella manera.

Deje que plantara aquellos suaves besos en mi mejilla y me abrazara, me limite a poner mi brazo alrededor de su espalda sin ejercer presión alguna solo para corresponder su gesto.
-otras vacaciones mas para compartir- asegure ladeando un poco la cabeza de lado a lado, sus preguntas eran algo complejas de contestar aunque lo resumiría todo en una sola oración.

-esta todo bien- conteste con tranquilidad, la verdad era que no todo iba bien, al paso que llevaba mi madre terminaría echándome de la casa, lo cual no supondría ser nada bueno ya que yo iba a Maine a verla y supuestamente como los jueces lo habían dicho pasar tiempo con ella, pero ahora que era mayor de edad podía hacer lo que yo quisiera…¿Por qué no había pensado en eso antes? Podía ir a Maine cada que quisiera.

-te ves bastante bien, al parecer todos lucen mejor después de un año- murmure recordando a Afry, ya no era la niña pequeña que había dejado hacia un año atrás –ven hay que entrar- le dije haciéndola un ademan con la cabeza para que me siguiera, el joven de la entrada nos dejo pasar sin decir nada, seguramente asi serian todos los demás, esbocé una media sonrisa triunfante.

-y como te esta yendo a ti, alguna novedad- le pregunte con tranquilidad mirando por el rabillo del ojo su mano, titube entre si tomarla o no mas al final crei que no seria lo correcto, porque eramos solo amigos, y los amigos no se tomaban de la mano cuando iban a pasar un buen rato al parque de diversiones.

-y…a cual te quieres subir primero- le pregunte semi-animadamente, porque no era de quienes siempre mostraban una sonrisa de hito en hito o reian a carcajadas por cualquier cosa, nisiquiera de quienes gustosos hablaban de su vida y sus sentimientos. Yo por mi parte quería subir a la montaña rusa, era posiblemente de los pocos juegos en los que mi infancia, la feliz, no la que me gustaría olvidar, volvia y me hacia presa, terminaba gritando y riendo mientras sentía aquella extraña sensación en el estomago, en alguna ocasión había llevado a una joven a un parque de diversiones, me había terminado por convencer de subir a la montaña risa, como era obvio me deje llevar y termine inclusive levantando los brazos, me había mostrado demasiado a esa joven, tanto que me había visto obligado a no volverle a hablar, pero eso no ocurriría con Naiala, me mantendría al margen y no terminaría cometiendo una tontería como la de aquella vez. Espere a que ella eligiera.

(Estaba esperando sus respuestas mientras examinaba todo, no porque se le hubiera olvidado su cara, sus facciones o sus gestos, si no porque se le hacia extraño tenerlo de nuevo, ahi, delante de su cara, sabia que sobre estas fechas solia venir, pero siempre le resultaba raro que llegara ese momento, mas que nada porque deseaba no tener que separarse de el y que no se fuera, aunque nunca decia nada le dolia que se fuera, se llevaban muy bien y era de los pocas personas con las que estaba agusto, el la entendia muy bien y no les hacia falta hablar demasiado para saber que pasaba o querian decir, asi que cuando le da esa contestacion lo mira, estaba triste por escuchar eso, pero no lo demuestra) ¿Solo unas vacaciones? (tan pronto como acaba la frase le mira) Osea me encanta que estes aqui y las podamos compartis no te vayas a pensar lo contrario, pero.. (se frena en seco sin terminar la frase y sigue con lo otro para cambiar de tema sin que se notara mucho) ¿Seguro que esta todo bien? (pregunta, pues no sabia porque notaba que no todo iba bin, pero tampoco queria presionarle, sabia como era con sus temas y ella era igual y sabia lo que molestaba que te estuvieran encima, pero aun asi penso que era mejor asegurarse) Bueno no he cambiado demasiado en un año ¿no? Al menos yo no me lo noto demasiado..(dice encogiendose de hombros no se veia muy cambiada , si habia crecido un poco, y llevaba el pelo mas largo y con otro corte de pelo, y el estar haciendo cada dia deporte habia adquirido un buen cuepro, torneado y firme, y el practicar surf hacia que tuviera un buen color de piel y el pelo se le pusiera mas claro y brillante,le sigue caminando a su ritmo cuando ve que en la puerta no les piden las entradas ni nada, se queda un poco sin saber que pasaba y mira a Kyle) ¿Y esto? (pregunta sin entender nada y sin esperar su respuesta sigue hablando) Pues en mi vida no hay muchas novedades la verdad, sigo igual que siempre, creo que en eso poco he cambiado, sigo con la misma gente, las mismas aficciones.. (sige caminando mirando todas las atracciones, habia ido muchas veces alli, le gustaba mucho las atracciones que hacian que liberaras adrenalina, asi que cuando ve la mpntaña rusa con tantos giros, vueltas para aqui, vueltas para alla no duda mas y la señala) Yo creo que deberiamos ir alli, empezar fuerte siempre ha sido lo mio (sonrie un poquito, el estar a su lado era como si no hubiera cambiado nada, y a pesar de los nervios iniciales, ya se iba posicionando todo en su sitio) ¿Que te parece?

Escuche sus palabras su titubeo ante terminar la frase, sabia bien a que refería, eran solo unas vacaciones, algunas semanas del año entero, las cuales no bastaba para saciar el tiempo perdido en el resto del año, pero ahora que lo pensaba, podía hacer lo que quisiera siendo ya mayor de edad, con que no le insinuara a mi padre que prefería pasar su tiempo con mi madre estaba todo bien, podría por ejemplo decirle que era muy poco tiempo con ella, que la veía poco y me gustaría pasar una o dos semanas mas al año con ella, entonces no me diría que no, porque el era quien desde temprana edad me había arrebatado el amor de una madre, y para cuando esta intento recuperar el tiempo perdido yo ya estaba hecho muy a la idea de que no la necesitaba, ni ella ni sus extrañas acciones cariñosas o palabras de aliento, no.

Rodé sus hombros con un brazo acercándola a mi mientras observaba las atracciones, como si aquel gesto fuese algo indiferente, no le observaba pues la tenia bastante cerca y seguramente la manera en que la mirase revelaría lo que dentro de mi se elevaba –tengo planeado rentar un piso, mi madre me sofoca...tu, segura que sin novedades – me limite a decir con tranquilidad, sabia que a ella también le debían de estar sucediendo cosas, en un año a todo mundo le pasaba algo, entraba a alguna escuela nueva, se peleaba con alguien, conseguía novio…novio. La voltee a ver separándola un poco de mi y como si del clima estuviésemos hablando pregunte –y como te va en el ámbito del amor, algún candidato- le pregunto recubriendo mi curiosidad con un manto de tangible indiferencia, porque me preocupaba por ella como un amigo se preocupa por una amiga ¿cierto?.

-no te preocupes, ya lo e arreglado podemos subirnos y hacer tantas cosas como quieras- asegure observando la montaña rusa, el único juego al que realmente me gustaba subir, y el único que esperaba no mencionase, pero ya que lo pedia no había manera de negarse, tanto por ser una mujer, como por ser una amiga y por el simple hecho de ser ella –me parece bien- asegure comenzando a andar hacia la fila que había para subir, en esos momentos me hubiese gustado haber pagado mas para no hacer fila, pero no sabia como Naiala se lo podía tomar y lo que menos quería era que se molestara conmigo. La fila avanzo rápido y en un santiamén nos encontrábamos ya buscando lugar, tome su mano jalando de ella con suavidad para llegar al primer asiento antes que nadie –pasa tu primero- le dijo dejándole espacio mientras con la mirada recorría el camino por el cual andaríamos, sonreí de una manera apenas perceptible.

(Iba caminando tan tranquilamente a su lado cuando nota que la rodea un poco con el brazo, era un gesto que no le habia molestado pero si le habia sorprendido bastante, pero no hace nada sigue como si nada para que no se pensara que la molestaba ni nada, cuando lo escucha gira levemente su cara, que miraba hacia las atracciones) ¿Estas planteandote alquilar un piso aqui en Maine? (empieza a pensar lo que supondria eso, podria venir mas a menudo y pasar temporadas mas largas, aunque toda esa incertidumbre le recorria por dentro no hace mencion ninguna) Ya sabes como son las madres Kyle y mas la tuya, que, bueno ha estado sin casi toda tu infancia (dice no muy convencida si seria lo mejor que podia decir, solo esperaba no molestarle con eso pues esa no era su intencion ni mucho menos, cuando escucha su pregunta hace una muequita casi impercibible, se queda pensando durante un rato) Pues quitando que con mi madre las cosas mas mas o menos y que he empezado la carrera de Derecho no hay nada mas salientable (sobre su carrera no le gustaba hablar, pues era a lo que se dedicaba su padre y le traia demasiados recuerdos, pero aun asi no cambio su sueño de convertirse en una gran abogada, respetada y reconocida, por el incidente que habia protagonizado su padre) Y de amores, pues, que yo sepa no tengo ningun candidato, al menos que lo haya reconocido ante mi, tengo mis cosillas, pero nada serio ni nada que merezca la pena ser comentado (dice totalmente tranquila e indiferente, se liaba con algun que otro chico, pero muchas veces ni ella misma entendia porque lo hacia, quizas buscaba el cariño que le faltaba o buscaba su vida de antes, por eso no pasaban de noches o dias, porque siempre al terminar se sentia igual o mas vacia que antes) ¿A ti como te va? (Pregunta con curiosidad, realmente queria saberlo pero no lo hubiera comentado, asi que ve en esto su oportunidad perfecta, cuando les toca subir y ve como le coge la mano, ella se la rodea suavemente con los dedos, acariciandole con el pulgar levemente haciendo que pareciera un gesto casual, pero la verdad que habia sido totalmente intencionado, cuando se toca nota como un cosquilleo por dentro y ve que le hace pasar delante, asi que aprovecha y se deshace de su mano con calma para que no se notase que se habia puesto nerviosa, con la excusa de agarrarse para no caer al entrar) Gracias (entra y se sienta esperando que se sentara el a su lado, la verdad estas cosas siempre le habian gustado, pero eso no quitaba que le impusieran su respeto, asi que tendria que hacer un gran esfuerzo para no agarrarse a el o lanzar algun que otro grito de miedo)

Asenti con completa calma ante su primera pregunta, esa era la idea, buscarme un lugar donde pasar el tiempo mientras iba de vacaciones a Maine, iria a ver a mi madre, de eso no había duda, podía ser que me tuviese harto y necesitara de mi propio espacio, pero sabia que estaba sola aunque fingiera lo contrario y que la única época del año que anhelaba era la que iba a visitarla, su pequeño que le habían quitado desde niño, siempre me decía que si ella se hubiera quedado con la custodia todo seria diferente, viviríamos los dos en aquel lugar y aunque ella no lo dijera y yo no le preguntara sabia que el fondo guardaba la esperanza de que de haber crecido con ella, no seria el chico callado y falto de sentimientos que ahora era, aunque sentimientos no le faltaban, expresarlos era lo que le fallaba, suspire por lo bajo al pensar en ese tipo de cosas, había cosas que era mejor no decir –podría venir mas seguido- le dijo con calma sin mirarla, torcí los labios rodando un poco los ojos –no ha sido mi culpa eso, si no de ella- agregue secamente volteando a verla, no me había molestado pero era franco con las cosas y si ella había decidido quedar embarazada y luego divorciarse, no podía esperar llevar una vida feliz en todo sentido, todo esto, ella misma se lo había provocado.

-derechos- repeti algo sorprendido, aunque debía por que estarlo, la verdad era que siempre me la había imaginado con un traje gris dándole ordenes a todo el mundo –espero que te este yendo bien- le dijo cerca del oído al voltear para ver un puesto de algodón de azúcar, era mejor primero subir a la atracciones fuertes y después comer, no fuera a serlas de mala y en una de esas terminaba regresando todo –a mi…estudio poco tu sabes no es lo mio, pero llevo un semestre en comercio, mi padre quiere que herede su fortuna y compañía, que puedo decir, y con respecto a lo otro, nada realmente serio- me encogí de hombros.

Tomo mi mano y como por accidente la acaricio, iba frente a ella por lo que la sonrisilla que escapó de mis labios era invisible para ella, la deje pasar y me senté a su lado bajando la barra de seguridad mientras la volteaba a ver, observe su rostro por unos instantes, cada que la veía me recordaba a ella, por lo que me retorcía por dentro para no hacer nada imprudente, nada que fuese a llevarme en picada, porque por años me había comportado indiferente con la gente y no dejaría que aquello se viniera abajo por un impulso, porque negaría hasta el cansancio lo que sentía por ella.

El joven reviso los cinturones y la barra para dejar partir el aparato, la primera bajaba era sorprendentemente alta, observe por un lado el panorama, podía ver todos los juegos desde ahí, me revolví en el asiento sujetándome con algo de fuerza, el carrito comenzo a descender a una velocidad sorprendente, grite, mas no por miedo sino por alegria, me recordaba tanto la infancia feliz que no habia tenido, y ahora venian las curvas.

(Lo escucha atentamente y tuerce un poquitin la boca al escucharle) No creo que tampoco fuera su culpa, son cosas de la vida no que ella haya buscado que ocurriera asi (dice no muy segura de estar haciendo bien en contestarle asi, pero era lo que ella opinaba segun su punto de vista y lo dice tal cual, sin parar a pensar si le iba a hacer daño o no)
Si al final he decidido meterme a esa carrera (mira hacia el frente) No hay queja, como es algo que me gusta y me motiva me resulta fácil y de estar con mi padre y esas cosas algunas cosas ya me las habia enseñado el.. (lo escucha asintiendo levemente) ¿Tu quieres heredar todo eso? (Nunca habian hablado de este tema y no sabia si el estaba conforme o no en hacer comercio y dedicarse al negocio familiar o si le hubiese gustado hacer otra cosa, al escuchar la otra contestacion no sabe si alegrarse o entristecerse, podria ser que no hubiera nada serio pero si, que hubiera algo, o tal vez no, quien sabe, pero aun asi prefiere quedarse con la duda y no comenta nada, no fuera a escuchar algo que no le gustara, siempre era de las que queria las cosas claras y a la cara, fuese lo que fuese, pero en ese tema no sabia porque, preferia saber poco y hacer como si nada. Se sienta y ve como el muchacho les viene a revisar los cinturones y demas, le dice que los sujete bien, un poco nerviosa, cuando empieza la subida y luego la bajada a tanta velocidad no aguanta mas y acaba agarrando la mano de Kyle, entrelazando los dedos con los suyos, siempre que tenia miedo o estaba muy nerviosa lo hacia, desde muy pequeña le tranquilizaba y en estos momentos tenia miedo, aunque le encantaban estas cosas le daban bastante miedo para que negarlo, pero lo mas posible seria que al bajar quisiera volver a subir, era asi de rara)

-tampoco ha sido mia, en cierta forma sus acciones fueran a desembocar su repercusiones en mi, no quiero seguir hablando sobre esto- asegure resueltamente sin observarle, de hecho hacia como si le hablase a la pared, porque de voltearla a ver y comenzar a debatir terminaría posiblemente, molestándome ante sus respuestas, o hiriéndola por mis cortantes y frívolas contestaciones, y en cualquier de los dos cosas suponía que era mejor detenerlo todo desde antes que se me escapase de las manos.

-supongo que eso te ayudara- le dije en voz baja escuchando con atención lo que decía, me encogí de hombros sin pensármelo demasiado –no importa mucho lo que quiera, mi padre asi lo a estipulado y creo que no me desagrada del todo- porque sin lugar a duda hubiese preferido estudiar filosofía y letras por ejemplo, era un apasionado de la lectura aunque no lo dijera, tantos años en la biblioteca de mi padre habían desarrollado mi gusto por ese ámbito.

Me senté y el juego empezó, sorprendiéndome por como había tomando mi mano y sujetándola con fuerza entrelazaba sus dedos con los míos, le volteé a ver por el rabillo del ojo golpeando levemente con el lado derecho del carrito que nos transportaba, pues este había dado una curva cerrada y a una velocidad tal, que seguramente de no haber llevado los debidos medios de seguridad hubiese salido despedido metros mas allá. Rei por lo bajo volteando a verla para asegurarme de que estuviese bien, le di un suave apretón en la mano –estas bien- le cuestione por lo bajo sintiendo que el aire se me iba de una y el cabello se me revolvía mientras íbamos por la ultima bajada, y esta vez quien sujeto fuerte fui yo, mas procurando siempre no lastimarla, acerque su mano a mi cuerpo para tener algún soporte, y asi como de golpe habíamos caído en picada de golpe el juego se detuvo dándome una última sacudida hacia enfrente y hacia atrás mientras esperábamos a que la barra metálica se levantara y nos dejase bajar. Una diminuta sonrisa aceraba mis labios aun sujetando la mano de Naiala, no la soltaria hasta que ella no lo hiciera.

(Al escuchar su contestacion, aunque habia sido en un tono bastante normal, se habia dado cuenta que habia llegado la hora de callar y dejar el tema, ni hubiera hecho falta que dijera que no queria hablar mas, se habia dado cuenta, Naiala le gustaba mucho observar a la gente por lo que sabia muy bien como se sentian o que querian solos con observales por un momento, rara vez se equivocaba, le mira por el rabillo de el ojo y como ve que ni la mira, se entristece un poco no le hubiera gustado herirle ni hacerle sentir mal, asi que aunque no solia hacerlo, se arrepiente un poco de haber dicho eso, asi que pronto deja sus pensamientos a un lado y sigue hablando como si nada, para no dar indicio que le habia "jodido" un poco la situacion en la que habian terminado con esa conversacion) Bueno a mi (le mira de frente) si me importa lo que quieras, pero si dices que no te desagrada me alegro mucho (dice no muy convencida de lo que estaba soltando, no era que no le gustara que se dedicara a eso, pero no estaba segura que si era algo que Kyle deseara. En cada giro y curva que la atraccion daba se agarraba y acercaba mas a Kyle, eso le hacia sentirse mejor, mas protegida, aparte que se sentia muy bien cuando lo tenia cerca, cuando ve que el la sujeta mas fuerte sonrie un poco de medio lado, al escuchar su pregunta asiente levemente con la cabeza) Si estoy bien ¿tu? (Pregunta ella tambien para cercionarse, cuando la atraccion para se levanta lentamente cuando se termina de levantar los sistemas de seguridad y demas, espera que Kyle salga pero sin soltarle la mano en ningun momento, le habia costado darsela y no ponerse roja, asi que si a el le incomodaba que fuera el quien la retirara, ella estaba bien asi)

Si le importaba, comenzaba a pensar en que habían significado aquellas palabras, porque claramente debía importarle, no por nada eramos buenos amigos y no por nada me agradaba pasar tiempo con ella, pero ¿habia algo mas detrás de esas simples palabras? No estaba seguro mas no tampoco era que le planease preguntar al respecto, porque por lo menos yo prefería tenerla como una amiga, porque sabia que si intentaba algo mas con ella, al final indudablemente terminaría hiriéndola, asi como lastimaba todo lo que realmente me importaba, de modo que había decidido desde corta edad, que no le haría saber a nadie que me importaba para no herirle, porque no había sensación peor que aquella, de saber que tanto valoraba a alguien y tanto velaba por esa persona, tanto que al final se volvía en contra suya, y algo malo terminaba ocurriendo, había sucedido con mis padres, le había ocurrido a Crystal, no dejaría que otra persona terminara herida, no alguien que valoraba tanto.

Asentí riendo por lo bajo mientras el juego se detenía, levante el tubo metálico con una mano y me levante esperando a que ella también lo hiciera, la deje salir antes que yo pues eso era educación en primer grado, de las cosas que a uno le enseñan desde que tiene uso de razón, un hombre siempre deja primero a una dama, nunca la deja caminar del lado de la calle, jamás le hace pagar algo, eran cosas básicas y si las mas complejas las sabia y las hacia no veía el porque esa no, sobre todo con ella –a que te quieres subir ahora- le pregunte con tranquilidad acomodándome el cabello con la mano libre mientras observaba las atracciones, aun sujetaba su mano con suavidad mientras salíamos del juego sentía el corazón y los sentidos algo acelerados por la adrenalina que había soltado ante tales bajadas y sacudidas.

Se me antojaba hacer mil cosas, queria unas espiropapas y un algodón de azúcar, entrar a la casa de los sustos y a aquella que era un laberinto cno espejos por doquier que deformaban el cuerpo y el rostro, queria tambien subir a la rueda de la fortuna y talvez si teniamos suerte estar en el punto mas alto cuando los fuegos artificiales estallasen en mil colores sobe el firmamento.

(Iban saliendo de la atraccion de la mano mientras intentaba vovler a tranquilizarse despues de soltar tanta adrenalina con tantos giros, bajadas y subidas que habian dado, lo escucha preguntarle eso y aun sin soltarle la mano se inclina un poco hacia delante para quedar frente a frente casi con el) Ah no, eso no, yo ya he elegido subir a la montaña rusa, el siguiente te toca a ti, asi que (hace una pequeña mueca con la boca) sorprendeme (Se vuelev a posicionar a su lado y tira de el levemente para seguir caminando, va mirando todo, los puestos de comida, los niños emocionados con todas las atracciones que habia, las familias felices todas juntas, las parejas de enamorados, la verdad al ver todo eso extrañaba no poder llegar a ser asi, pero las consecuencias de la vida le habian llevado a convertirse en una persona fria y distante, preferia no encariñarse con nadie, y si lo hacia se esforzaba al maximo para que la otra persona no se enterara, era como un escudo que ella misma ponia para no hacer daño a nadie ni que la lastimaran a ella, si la vida era mas sencilla sin sentimientos, pero tambien resultaba algo triste, no tener a nadie que te demostrara cariño ni tu hacerlo, ella solo tenia a su hermano, con el seguia siendo esa hermana mayor proctetora y cariñosa, aunque mismamente con el, tambien habia cambiado algo, aparta esos pensamientos de su cabeza, no queria darle mas vueltas, habia decidido ser asi, y hasta ahora le habia ido bien, asi que mira un poco a Kyle y viendo que aun no habia respondido, tira un poco de la mano) ¿Y bien? (Mientras caminaba inconscientemente, y para que negarlo, conscientemente le acariciaba la mano suavemente con el pulgar)

Esboce una media sonrisa de lado observando las atracciones y demás cosas, fue entonces que mi mirada topo con unos puestos de juegos de azar, apuestas y lanzar pelotas, romper globos con dardos o darle al blanco para tirar algo o en dado caso a alguien, también estaba esa usual escalera en la cual uno debía trepar haciendo equilibrio, nunca había logrado hacerlo y si bien lo había intentado solo una o dos veces no era eso en lo que me había fijado, no, era en los juegos de apuestas, seguramente sufría de aquella enfermedad en que las personas se vuelven adictas y dependientes de las apuestas, lo veía bastante posible.

Se lo señale con la mano que tenia libre observándola por el rabillo del ojo, y sin mas comencé a tirar de ella con suavidad en dirección de los juegos, apostaría en aquellos de caballos –solo serán uno o dos, lo prometo- asegure en voz baja, porque cualquiera persona que me conociera tanto como ella podía saber, ya fuese por mis acciones o mis palabras, que las apuestas eran parte fundamental de mi vida, sobre todo las grandes, no solia perder el dinero que apostaba sino duplicarlo varias veces.

Me percate que acariciaba mi mano mientras me había paso entre la multitud, me detuve una vez frente a la zona aquella volteando a verla de frente –que estas haciendo- le pregunte en voz baja, no quería hacerla sentir mal, ni que dejase de hacer aquello, pero mentir seria si dijese que estaba acostumbrado a aquel tipo de comportamiento de su parte, era como yo, una persona poco expresiva, por lo que el hecho de que acariciaba mi mano con su pulgar, era algo que para bien o para mal me producía curiosidad.

Mis ojos se posaron sobre su rostro, sobre sus ojos y sobre sus labios, en estos últimos una milésima de segundos mas que en el resto de su rostro, mas al instante alce la mirada hacia la suya –segura que estas bien…que ocurre- le pregunte nuevamente, aveces me gustaría poder llegar a ser mas expresivo y cariñoso, pero historias como la de “Where have you gone, charming Billy?” habían marcado mi infancia, de aquella historia en particular recordaba un párrafo “ soñaba con que no había guerra, con que no era un soldado, soñaba que Billy Boy Watkins no había muerto de un ataque al corazón la mañana anterior" producido por su miedo a morir, después de leer aquel relato, pues su autor había estado en una guerra en Vietnam, había pensado “valla, sus sentimientos y miedo le mataron”, de modo que lo mejor seria mantener los sentimientos al margen, como lo había hecho desde entonces y hasta ahora, pero con ella era inevitable, bajaba la guardia un tanto preocupándome por ella.

Lleve mi mano a su mejilla acariciándola con suavidad para seguidamente esbozar una débil sonrisa que se esfumo en un santiamén, aleje mi mano fingiendo que aquello no había ocurrido, desvié la mirada hacia los juegos, seguiríamos hasta que ella me dijera que le ocurria, aunque sabia que eso podía bien, jamás ocurrir.

(Cuando ve hacia donde le señala hace un gesto con la cara como si estuviera desconforme pero al escuchar aquella "promesa" no dice nada al respeto y sigue caminando a su lado) Vale, un par de apuesta y seguimos que nos quedan muchas atracciones a las que ir (dice eso a modo de disculpa, pero a lo que realidad se referia que no queria ver como acababa mas adicto, asi que intentaba ayudarlo sin que el se diera cuenta. Al escuchar lo que pregunta suelta la mano rapido y un poco bruscamente sin querer, se sonroja un poco, y desvia su mirada de la de el, mirando hacia el frente en todo momento, si lo miraba sus ojos acabarian delatando lo que iba a llevarse con ella a la tumba y no queria que eso ocurriera, asi que evita a toda costa que sus ojos se encuentren con los de el) Nada (dice sin mas y secamente, caminando un poco mas deprisa para ir unos pasos por delante de el, no queria que le viese la cara de avergonzada que tenia y mucho menos le iba a contar lo que estaba pasando y lo que estaba sintiendo con aquello) Si estoy bien.. (dice bajo, no muy convencida, pero total a oidos de Kyle solo seria un susurro casi imperceptible, pues estaban algo alejados, el notar su mano en su mejilla le habia llevado miles de sentimientos, esos sentimientos que llevaba años tratando de evitar, asi que intentaria que el resto de la estancia de Kyle en Maine transcurriera sin contacto fisico, si no le seria imposible de evitar hacer cosas que no deberia, ya le habia costado ahora al tenerlo tan cerca, frente a frente, el tener sus ojos mirandola, el tener su boca a escasos centimetros, no queria ahcer nada de lo que se pudiera arrepentir, si fuera otro chico se hubiera lanzado, total no habria sentimientos, pero con Kyle, todo eso..era diferente)

Enarque una ceja observando al frente vacio, me había dejado hablando solo y se había soltado de mi con total arrebato, como quien intenta huir de alguien que aparenta aprovecharse de uno, o de quien no le agrada que esa persona lo toque, suspire ampliamente tranquilizándome antes de siquiera pensar en seguirla, porque no sabia que le ocurría, me había soltado como si le hubiese dado un terrible y autentico toque, o como si me repudiara hasta en el fondo de su ser y no pudiera seguir sujetando mi mano por repulsión o algún parecido –ya va, lo que digas- murmure con tranquilidad dando media vuelta sobre mis talones para andar detrás de ella a algunos paso de distancia, me des confortaba en cierta manera su actitud pero a la vez me aliviaba, no sabia si yo seria capas de negarme a su tacto con tanta facilidad.

Pase por su lado sin mirarla ni siquiera rosarla, porque si ella se había alejado, no haría nada para hacer lo contrario, saque mi billetera y tome el billete mas chico con el cual cargaba, se lo entregue al señor y tome lugar en el puesto 8, solia ser mi numero de la suerte, ese y el 18, pero el 7 no, jamás el siete. Los caballos en el tablero comenzaron a moverse, todo lo que debía hacer era lanzar pelotas que podían caer en tres agujeros diferentes, cada uno hacia avanzar un numero de casillas diferente, y si bien nos hacían creer que nuestro numero de tiros era importante la verdad era que ya todo estaba arreglado, de modo que era apostar en un juego de azar aleatorio en su totalidad.

El caballo con el número ocho llego antes que los demás, mas por algún motivo que desconocía, o que conocía bastante bien, no me sentía con ánimos de animarme ante haber ganado, me limite a señalar el premio que quería, un diminuto perro rosa que me entregaron al instante, tenia mas ganas de darle un peluche de los grandes, de esas ranas y osos gigantes que las pareja ganan entre si, pero no sabia como llegaría a tomarse aquello, no después de cómo había reaccionado ante mi pregunta.

-toma- le dije con tranquilidad entregándole el peluche mientras me levantaba, avance unos pasos entre la multitud sacando la cajetilla de cigarros de mis bolsillos, asi como el encendedor, y podía decir que aquellas dos cosas eran mis únicas adicciones, eran bastante obvias, y bastante enfermizas ambas,me lleve el cigarro a los labios dejando que la punta se encendiera como tizones ante la lengua de fuego que emergia del encendedor, le di una amplia calada guardándome el humo unos instantes en los pulmones para después dejarlo salir por la boca, sabia que ese tipo de lugares públicos fumar estaba prohibido pero ¿Qué podía hacer? Era una de las pocas maneras en que dejaría de pensar en aquello que me seguía dando vueltas en la cabeza.

-y ahora…quieres ir a la montaña rusa o a la casa con los espejos- le pregunte resueltamente inhalando nuevamente del cigarro, me giraba un poco cada que dejaba escapar el humo para no darle de llano en el rostro, era una falta de respeto.

(Al escuhar lo que le dice se da cuenta que le habia molestado que hiciera eso, pero en ese momento necesito apartarse de el, no porque quisiera si no porque si no todo se iria al traste, aunque le gustaba mirar a la cara cuando le hablaban esta vez prefirio ni girarse, no queria ver la cara que tenia Kyle. Cuando ve que pasa por su lado sin decirle nada, sin tocarla, suelta un gran suspiro y va tras el despacio, ve como coge el numero 8, ella hubiera cogido el 7 sin duda, era su numero preferido y su numero de la suerte, pero era el que jugaba asi que no dice nada, se pone a su lado, cerca pero sin tocarle ni agobiarle, mira el tablero de juegos sin mirarle a el, cuando le da aquel peluche lo coge y hace una mueca, tal como se lo habia dado parecia que lo hacia sin ganas, asi que solo acierta a decir) Gracias (pero con un tono poco efusivo, las cosas parecian que iban a peor, ¿por que tendrian que ser asi los dos? si uno de los dos diera el paso, pero no los dos se guardaban las cosas y asi se hacian los malentendidos. Ve como coge el cigarro y fuma, mira alrededor buscando algun guardia que los pudiera ver, para avisar a Kyle pero no ve a nadie, pero aun asi le advierte) Deberias dejarlo.. o al menos no hacerlo en sitios que no se debe (dice sin dirigirle la mirada caminando tranquilamente) Pues vayamos a la casa de los espejos, despues volveremos a la montaña rusa, pero antes me gustaria pasar por la casa de los terrores (sabia que ir alli podria solucionar las cosas, ues con la escusa de tener miedo se acercaria mas a el y lo volveria a agarrar, y si no solucionaba nada, al menos estarian mas juntos que ahora)

Esbocé una diminuta mueca buscando algun guardia que estuviese en los alrededor, no podía evitar no fumar, simplemente era la manera en que alejaba los pensamientos incomodo y los malentendidos internos que tenia, inhalaba el denso humo que por un segundos me parecía me carcomía internamente, sabia que al paso que iba dentro de dos o tres años terminarían diagnosticándome un enfisema pulmonar o algo de ese calibre, pero por ahora era lo que menos me importaba, contal de sentirme agusto unos segundos lo demás venia valiendo –no me van a decir nada- asegure en voz baja dejando escapas esta vez el humo por la boca, tanto tenia fumando ya y tan a menudo lo hacia que sabia como dejar escapar el humo en ruedas, de modo que lo hise antes de dejarlo caer al suelo y pisarlo.

-entonces a la casa del terror iremos- asegure con tranquilidad y sin mas comencé a andar hacia donde estaba, sabia que si aguardaba la respiración forzando mis pulmones y después dejaba escapar el aire acumulado este salía con una mescolanza de los humos que se quedaban atrapados en los pulmones por causa del cigarro, mi madre me decía diariamente que los cigarrillos no eran buenos, que era una forma de matarme un poco cada dia solo por unos minutos de relajamiento decia que debía practicar mejor yoga o algo parecido, pero la verdad era que lo había analizado ya, y al no ser una persona muy expresiva los medios de desahogo eran, los cigarros, el alcohol y como ultimo medio las drogas o la agresión, de las dos ultimas ninguna me convencía, la verdad era que jamás había tomado drogas ni me había inyectado ninguna sustancia ilícita.

Me gire para verla unos segundos antes de detenerme frente a la casa, era tétrica y lúgubre desde sus afueras por lo que supuse que por dentro seria aun peor –segura que quieres entrar- le cuestione por lo bajo observando las terroríficas esculturas y disfraces que se exhibían en el exterior para llamar la atención de la gente, vi como una niña de escasos 13 años entraba, de modo que no podía verme como un cobarde y no hacerlo. Espere a que ella pasara primero, a fin de cuentas era educación y ella había elegido ese lugar.

Vale (Contesta secamente a lo que no le iban a decir nada) pero igualmente deberias dejarlo, por tu bien.. (dice añadiendo mas su opinion personal, sigue caminando tras el y ve que lo tira al suelo. Llegan a la casa de los terrores y verla ahi tan tan..terrorifica que se estaba arrepintiendo de haber escogido aquella atraccion, siempre que entraba acababa saliendo histerica, le pasaba con las pelis de terror, pero aun asi era de las pocas que iba a ver al cine, le encantaba por muy mal que lo pasara, era asi de masoca. Lo escucha y mira la gente que estaba entrando, entre ellos gente mas joven que ella misma por lo que no iba a parecer una cobarde aunque lo que mas le gustaria era irse a la noria o simplemente a tomar algo, pero no iba a quedar mal, odiaba quedar mal delante de la gente, asi que respira hondamente y se adelanta un poco) Claro que estoy segura, tan segura como una pueda estarlo (dice con aparente tranquilidad y seguridad aunque en realidad no era para nada asi. Entra poco a poco, echando un vistazo al cuarto antes de entrar buscando posibles muñecos, trampas o gente que se disfrazaba para dar los sustos, cuando se cercionaba que no era asi, entraba, aun asi no muy convencida. Todo estaba oscuro, apenas se veia lo que tenias al frente, y estaba en silencio, solo se escuchaban gritos de las personas que iban delante, o algun que otro ruidito de lo mas inquietante..llevaba unos segundos ahi quieta intentando ver como seguir, unos segundos que a ella le parecieron eternos, mira hacia atras y no ve a nadie ¿se habria perdido?) ¿Kyle? (pregunta con apenas un hilo de voz que le salia, tenia bastante miedo y mucho mas ahora que se veia "sola")

Me relamí el labio inferior observando como entrada, entre segundos después mientras intentaba armarme de valor y convencerme a mi mismo que no debía gritar, que por mucho que me asustase no saldría corriendo ni gritaría, con no hacer aquello me conformaba, porque sabia lo mal que iba a quedar frente a ella si me comportaba como un completo niño asustado, pero la verdad era que asi me sentía.

Entre con paso vacilante quedando estático sobre la entrada unos segundos, solo mientras mis pupilas adecuaban la escasa luz que había en el interior del lugar para ver mejor , fue entonces que segui andando escuchando los gritos al frente y los ruidos provenientes del techo y paredes.

-Naiala- llame en voz baja escuchando que decía mi nombre, apenas y había llegado a mis oídos como un deforme eco, seguí avanzando con cuidado y prestando suma atención a todo lo que ocurría a mi alrededor, intentaba convencerme de que todo lo que ocurría hay estaba debidamente diseñado, los monstruos eran personas disfrazadas, los ruidos sonidos pregrabados en una cinta, las cosas de utilería.

Seguí avanzando derecho, divisando una figura en la esquina contraria –oye Nai- llame en voz baja, la figura volteo violentamente desprendiendo de donde debían estar sus ojos un brillo inusual, de una tonalidad carmín y una risa siniestra, abri bien los ojos echando a correr en dirección paralela, eran solo muñecos y me aterraba tanto?, “remedo de gallina” pensé chocando con alguien, sujete a la persona para que esta no fuese a caer de bruces al suelo por mi sorpresivo choque con ella, tenia el corazón a mil.

Me percate de quien era –lo lamento Naiala- le dije en voz baja soltándola suavemente, porque para que no cayera había rodeado su cintura con mis manos y para atajarla y no dejarla caer la había atraído a mi, recordando como había reaccionado ante nuestro ultimo contacto, quite mis manos observándola –yo…esque vi algo- me limite a decir, no le diría que estaba mas que con miedo horrorizado ¿y quedar como un cobarde? Prefería no decir nada sobre aquello.

Escuche un ruido a mis espaldas por lo que volte rápidamente –podemos seguir avanzando- pregunte con fingida tranquilidad.

(Estaba esperando a que Kyle apareciera de donde se habia metido o quedado cuando nota que alguien corre hacia ella chocandose de pleno, nota como unas manos le agarran la cintura, menos mal que si no se habria caido ante tal golpe, se pone a chillar un poco asustada, pues no sabia quien era hasta que reconoce la voz que la estaba hablando) ¿Kyle? (aun asi pregunta no muy convencida, estaba realmente asustada y por mucho que lo intentaba no lo iba a poder ocultar. Cuando escucha lo que le dice menea suavemente la cabeza negando) No pasa nada (sonrie levemente, total apenas la podria ver, ante la idea de que estaba asustado, por lo que lo veria mas vulnerable y no sabia porque, aquella idea le atraia) Si sigamos, pero esta vez pasa tu delante, no quiero que me vuelvas a abandonar (dice bromeando un poco pero con el mismo tono, relajado de siempre. Pero cuando escucha un ruido institivamente se pega a Kyle, quedando a escasos centimetros sus caras, se queda mirandole fijamente los ojos, estatica, sin decir ni hacer nada..hasta parecia que se le estaba olvidando respirar)

-no te abandone solo…me quede observando una estatua- asegure en voz baja no muy convencido de aquello, se acerco a mi vertiginosamente quedando a escasos centímetros de mi rostro, abri los labios acercándome a ella alejándome al instantes mientras me preguntaba que demonios creía que estaba haciendo, de haber sido cualquier otra joven lo hubiese hecho, de acuerdo talvez no, debería sentir por ella una atracción, o curiosidad para incitarme a hacerlo, no era de quienes se besuqueaban con medio mundo ni nada por el estilo, pero era decir, era Naiala y si la besaba no sabia que podría resultar de aquello.
Tome su mano comenzó a andar delante de ella con lentitud observando a diestra y siniestra cada artefacto, volteando ante cada ruido y deteniéndome cada que creía que algo saldría a asustarnos.

-gran idea venir aquí- asegure irónicamente sintiendo que la mano me temblaba un poco, intente tranquilizarme pues aquel movimiento seria bastante obvio teniendo en cuenta que sujetaba su mano. Pare en seco ante unas escaleras decidiendo por subir los escalones con lentitud, estaba casi seguro que saldría alguna mano para sujetarme el pie y arrastrarme escaleras abajo como en aquellas películas de terror, la idea de saltar sobre Naiala invadió mis pensamientos de una manera tentadora.

-cuidado- le dije en voz baja subiendo con lentitud, me esforzaba por no llegar a gritar si algo ocurria, me acerque un poco a ella por si llegaba a asustarse tubiera de donde sostenerse, la verdad era que en aquel momento recorde nuevamente la historia de Billy Boy, me aterraba la idea.

(Cuando ve que separa un poco sus labios, se acerca un poco haciendo lo mismo, sin quitar ni por un instante sus ojos de los de el, pero al ver que se separa tan bruscamente de ella se queda un poco cortada y sobre todo pensativa ¿que habia sido eso? ¿que habia pasado que le habia entrado esas ganas de besarle? y no un beso como le daria a otro chico que le pudiera atraer, eso habia sido diferente y sobre todo raro, ya no sabia que le daba mas miedo la maldita atraccion o aquellos sentimientos que estaba despertando en ella, cuando nota su mano y como tira con ella se deja llevar sin decir nada, pero los pensamientos seguian amontonandose en su cabeza, sin ningun orden. Llegan a unas escaleras y mira hacia arriba, Kyle habia decidido subir, Naiala iba de su mano y no estaba muy segura de querer subir, en todas las peliculas aparecian las manos entre las escaleras y eso le daba realmente panico, al escuchar las palabras de Kyle, ironicas hace una mueca) Bueno.. tampoco esta siendo para tanto (dice para escusarse pero estaba totalmente de acuerdo con el, habia sido una pesima idea elegir esa atracion) Pero ahora ya estamos aqui (dice sacandole hierro al asunto y empezando a subir aquellas escaleras, pegada a Kyle) Tengo miedo (reconoce sin pensarselo dos veces, ahora poco le importaba lo que pudiera pensar de ella, estaba asuastada de verdad, lo que no sabia era que le asustaba mas)

-no te preocupes, solo nos dará un ataque al corazón- le dije por lo bajo recordando cada línea de la historia de Billy Boy con total claridad, y eso era lo que le aterraba del asunto, los sentimiento de Billy eran lo que lo habían terminado matando, había escuchado un poof, pensando que una granada había explotado y lo había matado, cuando realmente nada le había pasado, el miedo de morir fue el mismo que lo llevo a la tumba, un ataque al corazón causado por el pánico y el estrés.

-si estamos aquí- repeti en un tono inaudible escuchando lo que decía cerca de mi oído por lo ceñida que se encontraba a mi, me sorprendió bastante aquello, pues ella no era de quienes solian exhibir como se sentían, no era de quienes gustaban saber que los demás conocían como se sentían, mucho menos si era miedo, debía estar realmente aterrada para confesarme algo asi. Yo también lo estaba, pero no era algo que le fuese a decir.

-ei tranquila, aquí estoy- asegure intentando animarla, porque antes de que nada llegase a pasarle debían pasarme a mi, no iba a permitir que nada malo le ocurriera, y era por eso que no me atrevía a decirle lo que sentía, porque indudablemente al final terminaría lastimándola. Llege hasta el segundo piso volteando a verla ¿Qué se suponía que debía hacer? Tenia ante mi la viva imagen de Crystal, con un carácter diferente, mas por diferente no se entiende malo, sino que a su modo cada una había despertando en mi aquel cosquilleo, desvié mi mirada de ella observando a izquierda y derecha.

-no te preocupes…yo te voy a cuidar…- murmure sonriendo, aquellas mismas palabras le había dicho a mi pequeña amiga, los recuerdos se me arremolinaron como imágenes en la retina, el collar que le iba a dar, la flor que ella me iba a entregar, su risa, su rostro y después, su imagen borrosa en el féretro, estremecí ante las imágenes comenzando a andar hacia la derecha aun sujetando firmemente su mano, tire de ella con suavidad colocándola frente a mi aunque con su espalda sobre su torso, la rodé con mis brazos acercando mis labios a su oído –si te da miedo puedes cerrar los ojos, yo te guio- asegure con tranquilidad, y aunque yo también me estuviese muriendo del miedo si para que ella se tranquilizara debía mantener los ojos abiertos y guiarla aunque yo estuviese viendo todo, asi lo haría.

No digas eso che no nos va a pasar nada (al decir esto hace una mueca con la boca, el iba delante y no la veria, no estaba muy segura que nos les fuera a pasar nada, pero esperaba que no fuera asi. Al escuchar sus palabras se tranquiliza un poco, estaba bien saber que el la iba a cuidar y mas que estaba a su lado, se muerde flojito el labio inferior cuando lo siente detras de ella, abrazondola y siente su respiracion en el cuello, asiente levemente con la cabeza) Gracias Kyle (dice con un tono de gratitud, la verdad le agradecia todo aquello, aunque lo estuviera pasando mal, aquel momento la estaba haciendo sentir, especial y a la vez rara, le pasa las manos por los brazos, casi rozandole para acabar "abrazandose" ella misma tambien para coger las manos de el entre sus dedos y asi sentirlo mas cerca) Espero que no haya mas personas y esto se acabe pronto (la verdad queria que se acabaran la angustia y el miedo, pero no en el modo que ellos dos estaban)

Sonrei ampliamente al sentir sus manos sobre la mías, aunque al instante borre aquel gesto pensando en lo mucho que me estaba equivocando, la estaba dejando pasar la línea que yo mismo había forjado con tanto esfuerzo durante mayor parte de mi vida, debía hacerlo por su bien, o eso suponía.

-te gustan esta clase de sustos- le pregunte por lo bajo, porque ella había decido ir ahí y ahora ambos nos moríamos de miedo, un estrepitoso ruido me hiso dar un suave salto, gire el rostro topándome con una mascara a escasos centímetros de mi rostro, abri desmesuradamente los labios reprimiendo un grito. Tome con firmeza Naiala por la cintura levantándola unos centímetros del suelo para echar a correr, baje las escaleras a zancadas saliendo de la atracción aun con ella en brazos, la baje con suavidad intentando tranquilizarme –lo hice para que no te asustaras y saliéramos rápido de ahí- me excuse tomando su mano disimuladamente –porfavor ahora algo tranquilo- le pedi sonriendo de medio lado, se me antojaba ir por un algodón de azúcar y de hay a la rueda de la fortuna talvez.