Jessica Scott

Nombre:
Jessica Scott

Apodos:
Jess

Edad:
17 años

Grupo:
Habitante de Maine

Descripción:
Jessica Stroup

Descripción Psicológica:
Jessica es sin duda una chica con mucho carácter, no es de esas débiles e inmaduras que no son capaces de afrontar las decisiones, pero sí que es difícil de manejar. Piensa antes de actúar, algo que no todos los de su entorno hacen. Es fría y algo calculadora y tiene las cosas muy claras, aunque no por ello es borde ni seca; todo lo contrario: es alegre, divertida, la típica chica con la que puedes conversar de cualquier tema, desde el deporte, pasando por la política y llegando a temas triviales. A veces está dotada de un sentido del humor que no todo el mundo entiende, por lo que al principio la catalogaban de "rarita", pero con el paso del tiempo se ha logrado hacer famosa entre las gentes de Maine e incluso los turistas; y no especialmente por su cara bonita, que sin duda la tiene.

Hobbies:
-Ir en bicicleta por el pueblo.
-Nadar, ya sea en la playa o en la piscina.

Le agrada:
-Pasear por la playa y tomar el sol hasta no aguantar más.
-Ver una película tumbada en el sofá y comiendo palomitas y chocolate.
-Dormir. Le encanta dormir; Si por ella fuera, dormiría las veinticuatro horas del día, pero piensa que la vida es demasiado corta para desaprovecharla así.

Le desagrada:
-La mentira y las injusticias; al igual que la hipocresía.
-Las serpientes. ¡Las odia!
-Que se le pegue la arena al cuerpo cuando se acaba de poner la crema solar.

Historia:
Tanto Jessica como su hermano Nicolas llevan viviendo toda su vida en Maine. Sus padres son dueños de una cafetería en el centro y disfrutan de una situación privilegiada, ya que no son ricos, pero nunca les faltó de nada. Siempre han presumido de que se han llevado bien, la típica familia unida que todos los Domingos se reúne en casa de los abuelos para celebrar una gran comilona y contar batallitas, recordar los buenos viejos tiempos y pasar, en definitiva, un buen rato.

Ambos desean que llegue el verano para que el pequeño pueblo de Maine se llene de jóvenes de su edad, ya que durante el año este grupo de personas es más reducido. Año tras año se han habituado a la presencia de toda esa gente que llega a pasar el verano y rápidamente se formaron su grupo con el que salir de fiesta, ir a la playa a jugar un buen partido de voleyball o, incluso, organizar sus propias fiestas.
Pero no todo es diversión. Cuando algo pasa en Maine, cuando algo se rompe.. las críticas y las miradas van hacia ellos, ya que son los que permanentemente viven allí y los que se supone tendrían que tener más cuidado con la ciudad. Y es que, tanto unos tienen razón como otros: Si ellos no han sido los que han provocado el estropicio, al menos sabían de él o habían sido participes en cierta medida.

Con respecto al ámbito personal, Jessica goza de una plena libertad. Nunca se ha sentido atada a ninguna relación, básicamente porque no las ha tenido y porque de momento no las quiere tener. Ningún chico le ha llegado nunca tan adentro como para que perdiera la cabeza por él, y es que a pesar de parecer una persona superficial tiene mucho fondo, y es difícil saber tanto lo que piensa como lo que siente.

En la relación de familia todo marcha bien, sobre ruedas podría decir. O viento en popa, para adaptarnos más al entorno en el que gira su vida, la ciudad de Maine, o la playa.. en donde pasa largas horas. Con su hermano tiene una buena relación, aunque a veces le cansa eso de ser la pequeña pero aparentar ser la mayor. Con sus padres tiene los típicos roces que tienen las adolescentes con sus progenitores, pero vamos, lo normal para su edad. Y con sus abuelos.. ¿qué decir de su relación con ellos? Simplemente los adora.